miércoles, 26 de diciembre de 2012

http://www.youtube.com/watch?v=pq9FHXm-rtI 

ATHLETIC CLUB , BIZI, SENTITU.

Un sentimiento religioso que se oficia en 'La Catedral' de San Mamés, donde la liturgia del fútbol y el ritual de los cánticos, alabanzas y plegarias unen en comunión a equipo y afición bajo un único mandamiento: "Amarás al Athletic por encima de a cualquier otro equipo".
Athletic. Una palabra que representa algo único. Ocho letras que son el orgullo de una afición entregada. Un himno que enardece a un pueblo. Dos colores que despiertan la pasión.

 ¿Qué es el ATHLETIC? El athletic es el aitite y el nieto compartiendo bandera. El bocadillo de ama o la bufanda tejida por amama. La bota del vecino y el abrazo con el desconocido… La lluvia racheada, entrando por Ingenieros. La mujer que de niña soñó con calzar botas y la hija que lo logró. El último domingo compartido con aita, sin saber que sería el…último. El primer beso íntimo… rodeado de 47.000 ojos. El escudo al atardecer, al fondo de una calle llena de bares. El puro fumado por uno, pero compartido por todos. El grito desesperado, la emoción desbordada, la lágrima suelta y el placer de los placeres. El éxtasis. El rugido del león. El ¿A por ellos¿ y el Beste bat¿ o el ¿Athleeeeeeeeeeeeeetic¿ con bufandas al viento. Los primeros cortos y rotundos. El tercer, arrastrado con sentimiento, dejándote el alma: feliz. Así es nuestro Club, de todos y de nadie, singular en filosofía y plural en seguidores. Tan respetado como incomprendido. Hay equipos que hacen historia, en el Athletic queremos hacer leyenda. Y todo porque, un día, en un acuerdo no escrito, quisimos seguir nuestro camino. Donde otros veían el fina, nosotros veíamos principios. Elegimos ser David, cuando todos querían ser Goliat. A la utopía con la épica pasando por Bilbao. En eso estábamos y estamos. Un acuerdo que se mantiene, pese a todo, entre millones de aficionados alejados en lo geográfico, lo político, lo cultural y lo social. Aquel día, elegimos “vencer menos, para ganar más”. Y entendimos que el Athletic es una cuestión de familia. Lo del fútbol, créeme, es secundario…